sábado, 26 de enero de 2013

Pizoteador orko casero

Hacía ya tiempo que tenía ganas de colgar algunas fotos del Pizoteador de Morguez. Se trata de la mayor máquina de guerra de los orkos del klan Zuzto y Muerte, y es el orgullo personal del kaudillo GranKarnaka (los informes imperiales mencionan que durante el asalto definitivo a Jarkov fue uno de los principales lugartenientes de Grogg Zacodemugre; posteriormente se autodesignó como "el máz verdadero Gran Kaudillo de ezta roka de humanoz" e inició una sangrienta guerra entre clanes en pleno proceso de conquista. Pero esa es otra historia).

Las máquinas orkas son creaciones de los mekánikos orkos y se supone que no hay dos iguales. Morguez quería un Pizoteador "perzonalizado" y le atraían las máquinas de las películas clásicas de ciencia ficción, de modo que se inspiró en ese aspecto. Los materiales (como buen orko) tienen las procedencias más insospechadas: materiales de construcción, restos de juguetes, piezas sobrantes, bolas sorpresa...


Uno de los aspectos que más preocupaban a Morguez era que fuese fácil de transportar. Para ello utilizó imanes en las uniones, lo que le permitía montar las piezas rápidamente sin riesgo de que se rompiesen, y además cambiar la postura y el encaramiento de los brazos. Sencillo e ingenioso, aunque no tenga fotos de ellas...
El pizoteador ya imprimado, con los últimos añadidos: trofeos, más cañones y una bola de demolición hecha a partir de un huevo Kinder y hojas de rebanadoras orkas. Terrorífico.




Primeras luces y calcomanías. Le añadió los colores base y glifos orkos, y a algunas planchas restos de iconografía imperial. Los orkos canibalizan cualquier resto que encuentren, y los blindados imperiales son una fuente de materiales de lo más idónea.






Una versión alternativa con puño sierra. Morguez no lo llegó a estrenar porque prefería el aspecto de la bola de demolición, más brutal e incontrolable. Más orko, en definitiva.



Detalle de la superametralladora. En la foto no se aprecia, pero Morguez aprovechó el mecanismo de cuerda de un juguete para que rotara de verdad cada vez que la disparaba. Esta mole realizó su mayor mérito en las resecas planicies de Iklios Tertia, donde en una partida de Apocalipsis diezmó  una Compañia de blindados del 77º de Jargall con una única (y sorprendentemente afortunada) ráfaga de disparos. La regla especial del arma dice que puedes dispararla ininterrumpidamente de un objetivo a otro cercano hasta que saques un resultado doble. Morguez se saltó todas las estadísticas y estuvo disparando durante veinticinco minutos.



Luces definitivas aplicadas en cantidades generosas con una esponja, al igual que el óxido, que el aspecto herrumbroso y sucio queda muy adecuado en estos ingenios. Vistas delantera, lateral y trasera.





Algunos detalles: el artillero gretchin anotando los tantos en la escotilla superior, los restos de un pobre guardia imperial a modo de trofeo/amuleto/arma psicológica, y la parte posterior.






viernes, 4 de enero de 2013

Zombis de Studio Miniatures ( I )

Después de un parón con los pinceles más largo de lo que me hubiera gustado he encontrado un hueco para mostrar la última hornada de zombis que he pintado, y con la que pienso darme un pequeño descanso de esta temática (¡no todo va a ser pintar sangre reseca y vísceras!). La caja en cuestión pertenece a Studio Miniatures, que tiene la que para mí es la mejor gama de zombis del mercado, y se presenta como "Zombie Mob Part 1". Viene empaquetada de manera impecable en una caja de plástico rígido acolchada en el interior. Qué bien han sabido dar uso a los excedentes de cajas de vídeos VHS...



Las minis tienen un aspecto excelente. Un modelado bien detallado, si acaso algo anguloso en algunos de los modelos, con un acabado bastante bueno (sin llegar a la perfección de otras marcas como Haslefree, por ejemplo) aunque nada nos va a evitar tener que eliminar las típicas líneas de molde. Lo mejor de estas  figuras es la fuerte personalidad que destilan: todas parecen contar en cierta medida alguna pequeña historia o darte algún detalle sobre quiénes pudieron ser en vida, por lo que son estupendos para dar un poco de vistosidad en medio de tus decenas de zombis "genéricos".

No me enrollo más, y pongo las fotos. A diferencia del aspecto apagado que le había dado a los zombis que había pintado anteriormente, con estos he decidido utilizar colores algo más luminosos para que destaquen en medio de los demás zombis y reflejen el aspecto de muertos "recientes" que tienen la mayoría de ellas.



La primera de las minis me recordaba a una secretaria: traje de falda y chaqueta, blusa y moño. Opté por pintarla en unos colores discretos. Como las heridas que presenta son superficiales me dediqué a experimentar un poco con el tono de piel, y finalmente me quedó de un color gris verdoso del que estoy muy satisfecho ya que no utilicé verde en ningún momento. La sangre reseca en la mejilla y la mano la hice mezclando a partes iguales Mechrite Red de GW y Azul Real de Vallejo, punteando con cuidado alrededor de las heridas.



La segunda mini tiene una pose desgarbada que me gusta, aunque pienso que el aspecto acartonado de la ropa le hace desmerecer un tanto. Pinté los pantalones y la camiseta en colores claros e intenté -con éxito relativo- que pareciesen desgastados, sin pasarme en añadirle suciedad para que no quedase demasiado evidente. 
Este zombi tiene media cara destrozada y varios impactos de bala, y utilicé para la carne ensangrentada la mezcla anterior añadiendo una pequeña parte de Marrón Chocolate de Vallejo y negro. Luego le dí un acabado en barniz brillante para simular la carne al descubierto, pero lo acabé corrigiendo con barniz mate. Decididamente no me gusta el aspecto satinado en una figura.



La mini del vagabundo cuenta toda una historia por sí sola: ¿cómo perdió la mano? ¿fue antes o después de reanimarse? Decididamente alguien tuvo un encontronazo con nuestro podrido amigo y utilizó una katana para defenderse, al parecer con escaso éxito... ¿estará su propietario también convertido en un muerto andrajoso y tambaleante?
Decidí pintarlo en tonos marrones y grises oscuros intentando reflejar su condición de vagabundo, con la barba rubia y el chaleco como contraste. Creo que el resultado es bastante bueno, y estoy bastante satisfecho de esta figura.



La cuarta mini parece estar arrastrando una pierna, con un brazo alzado intentando agarrar a una presa. No obstante la pose no me parece demasiado lograda, la verdad. Para el vestido no me apetecía complicarme demasiado, así que lo pinté en azul celeste de Vallejo y le saqué algunas luces, para terminar dándole un lavado aguado de Devlan Mud de GW sin que se saliese de las zonas de sombra. Las botas las pinté en color Marfil de Vallejo y las sombreé con un simple lavado de tinta Gryphone Sepia de GW.
La piel la pinté intentando usar el mismo procedimiento que con la secretaria zombi pero con menor éxito: no conseguí recrear el tono verdoso del rostro de la primera, así que me centré en darle un tono más grisáceo y demacrado... No es una mini especialmente vistosa, pero creo que el resultado es convincente.

En breve espero colgar las miniaturas restantes. Si alguien está embarcado en una campaña de temática zombi y no sabe  por qué minis decidirse aún está a tiempo de añadir un renglón más a la carta de los Reyes!


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